La presencia de síntomas durante la Primavera, del tipo de estornudos en salvas, matutinos, obstrucción nasal, rinorrea, prurito nasal y ocular, lacrimeo o enrojecimiento ocular, son totalmente sugerentes de  sensibilización a pólenes, gramineas, sobre todo durante el mes de Mayo, que se van a incrementar si paseamos por jardines, o los dias de viento, en los cuales se movilizan los granos de polen.

   En algunos niños, se evidenciará tos, muy repetitiva, incluso con sibilancias en el tórax en algunos de ellos, que reflejan un componente bronquial, que nos está informando de la presencia de un cuadro asmático con una base alérgica.

   Todos estos procesos tienen un tratamiento muy eficaz, abordable en cualquier consulta de Pediatría, donde la accesibilidad con el pediatra es fácil en la mayoría de los Centros de Salud o en las consultas privadas del pediatra de confianza que conozca mejor a nuestro hijo.

   El manejo farmacológico con antihistamínicos de última generación en dosis únicas, diarias, con desloratadina o Levocetirizina, va a resolver un gran número de situaciones, en el caso de sibilancias o presencia de tos de origen bronquial, habrá que adicionar otros fármacos, como Montelukast o Corticoides inhalados de forma preventiva, junto con broncodilatadores en el momento agudo del problema.

   Cuando la sintomatología se hace persistente o repetitiva a pesar del adecuado tratamiento farmacológico, se implementa el uso de inmunoterapia específica, que bien seleccionada, ayuda de forma notable al control de los síntomas y a la prevención en el desarrollo de nuevas alergias.